martes, 9 de mayo de 2017

Billions. Segunda temporada

¿De verdad China es un cerdo con LSD? ¿No sabemos que hará y dónde correrá ese cerdo? Billions empieza con guerra, sigue con la guerra con la que acabó la primera temporada. Pizza y vino para todos. Los mejores vinos, los hechos con tus propios pies. La separación, los cafés a las seis de la mañana, el precio de las charlas, las becarias/analistas/veganas, el sopranismo de las terapeutas, los ataques de las fuerzas invisibles. Será por flores, será por momentos en esta segunda temporada de de Billions. Viva la guerra, viva el cuero, viva el reloj que no lleva al lado oscuro de las investigaciones. Agentes dobles para momentos triples. Velas en las papeleras. ¿Discutir por los ideales? ¿Las relaciones reales son posibles en mitad de la jungla? ¿Hay misiones sin principios? ¿Líderes acosados por la justicia antionce? Jodiendas con vistas a comida tailandesa. Templos violados. ¿Qué mierda tenemos que aguantar rodeados de paletos que no valoran lo que tienen? ¿Es sagrado el matrimonio? Y como pasaba en El Séquito, siempre podemos comprar un equipo de la NFL. ¿Voto significa promesa? ¿A estas alturas? Todo el mundo es carne de cañón. Todo el mundo. Jugar a dos barajas y acabar al. ¿No hay lugar para los débiles? La debilidad de los abusones, a estas alturas, está sobrevalorada. Trampolines. Regresar. Los malos que parecen buenos y los buenos que parecen aún más malos. Mierda familiar. Enchufes. Canijas calvas. Contactos. Peleas con mierda subvencionada. Casinos que no llegan ni a bacalá. "Cuando algo se jode, hay que volver a su génesis". Frases hechas. Licencias que tienen un precio. Sobrinos que merecen morir para sobrevivir en el más allá. Objetivos encubiertos. Mala baba (bien)intencionada. Jurar por vidas que no valen un puto duro. Periodista metidos a comemierdas, como la mayoría de ellos. Apretones de manos que definen momentos. QB que provocan amor hacia el padre. Opciones para un cargo. Chefs con ganas de juerga al lado de la piscina. Entrevistas que te meten en jardines. Hijos que repiten las mierdas de los padres (lecciones paternas). El cuarto poder, las medias verdades, las mentiras, los trabajos de detectives, los divorcios (mal)llevados. Justificaciones con papel de fumar. Libertad, libertad, libertad. (Des)joder(nos). Sugerencias con mucha comida. Imposible no entra en ciertos diccionarios. Austeridad, austeridad, austeridad. Imagen, perder dinero, destrozos, valoraciones de opciones, mierda, mierda y mierda. Mejor decir "chuleta de mutón" que oveja, que entonces no comemos. Canguro y rata, genes comunes, tanto o más que políticos y políticos. Elegir cuesta, y da sed. Corruptos e hipócritas. Todo en el mismo saco. Todo es mentira en la segunda de Billions. Incluso, cuando estás en las alturas cargado con ese escocés de etiqueta azul que haría que un mongólico pensara como Albert Einstein. Viva lo políticamente incorrecto. Viva la mentira judicial. Desde arriba. Siempre recordamos frases gallardonianas: «obsceno espectáculo de unos políticos eligiendo a los jueces que los podían juzgar». Todo mentira. Jugar con cartas marcadas, jugar con jodiendas con vistas a la toga, ver lo que ocurre y actuar, engañar, manchar, perjurar en mierda y creer que la suerte juega a tu favor. 2000 dólares en flores. Amor y desamor con la luz pagada. Creer que los sobacos de Mataharis destilaban dulzura. Todas esas mierdas. Todas esas. Todas. ¿Quién es más cabrón es número 1 o el número? ¿Quién inventó el nombre de los números? ¿Por qué el gremio de la piruleta lo jode todo? ¿Por qué a partir del 15 los nombres de los números son rudimentarios? ¿Está todo listo? ¿Está la rana dorada preparada? ¿La estupidez es vecina de la fuerza? ¿Seguro? Del 4 al 11 y saltando al zumo helado. Al final todo se reduce a la venganza, al dolor por el dolor, a perseguir cueste lo que cueste aunque suponga perder a la familia.