jueves, 12 de marzo de 2009

El corrector


Del 11m hay gente que piensa que está todo dicho. Otros piensan, o dicen que piensan sin pensarlo, que no está ni la mitad de la mitad de lo ocurrido. La visión que da Ricardo Menéndez Salmón en El corrector es otra de ella. No es un libro únicamente sobre el atentado atroz (¿hay alguno que no lo sea?). Además de las opiniones que veía por la tele de Ibarretxe (¡Adios, Ibarretxe, Adios!), Otegi, Aznar y Acebes (que sólo sale muy al final), se olvida de otras (y no me estoy refiriendo a los políticos). A mí, sinceramente, lo que más asco me dio fue la labor de muchos de los periodistas. De la mayoría. Esa mañana me fui a estudiar a la biblioteca para seguir preparándome unas oposiciones que todavía me amargan el pensamiento (llevaba desde octubre del 2001 a saco con ellas). A las 12, en el claustro universitario, toda la peña empezó a gritar el Eta no, y todas esas palabras tan manidas. ¿Es que la gente se cree el tocomocho de la democracia? Putos ilusos. Seguid creyendo mentiras y acabaréis haciendo lo que el emperador quiera, en cada momento, en cada segundo. Hoy, la mitad del gabinete actual, perdería el culo por hacerse una foto con el César Obama. Veremos la cara de Zp en abril con Barack, satisfecho como lo estaba Ansar con George Walker Bush. Bendito sea el dulcísimo nombre del Creador, no de Alá. En fín, que es una lástima que un tipo con un talento increíble, eso no se puede dudar, de esta visión tan “televisiva” del trenicidio. De una bestialidad. Es el tercer libro que me he tragado de Menéndez Salmón. Ya he hablado por aquí de La Ofensa y de Derrumbe. En este último, además del 11m hace un repaso de su obra en pinceladas impresionistas, sólo descubre una ínfima parte de su grandísimo ingenio y talento, vuelvo a decir, para juntar letras, para aunar sentimientos, para ayuntar en definitiva. También habla de historias personales, de desencuentros familiares, de cotidianeidad, de momentos personales, de soledad y sexo, de la evocación de la panadera con la bata blanca empapada de harina y calor. Y de muchas cosas más. Y donde se demuestra la valía es en el interés: aunque te aburre el puto 11m, bazofia sobre bazofia, el tipo de engancha a sus letras. Y encima es seguidor del gran Thomas Bernhard, ese cabronazo increíble que descubrí gracias a la superjefa Maribel García Egea (a ver cuando caen unos azules con Don Mateo, futura directora). Pues eso. Que cada uno es muy libre de pensar lo que quiera. Pero los muertos ahí están. Justo ahí. Y ayer no escuché a Rubalcaba. Y aquí, para ególatras, yo. 

6 comentarios:

García Francés dijo...

D. Supersalvajuan, del 11m, mejo ni hablamos y si usted es un ególatra, al menos, lo es de manera encantadora.

Yo no creo qiue lo sea, más parece un alma independiente...

Degüelle, D. Mariano, degüelle

Corrupción a babor y a estribor. Estamos, presuntamente, de mierda hasta el cuello. Ahora le toca al PP dar explicaciones. Según el diario El Mundo, el preso Sr. Correa regaló un coche al, recién dimitido alcalde de Pozuelo, Sr. Sepúlveda.

Cojonudo. Un regalo de 52.00 euracos de vellón, ¿a cambio de qué? Al Sr. Rajoy no le consta. Y a Dª Ana Mato, entonces su esposa, tampoco. Toca limpiar, Sr. Rajoy, no espere a que le llegue la mierda al cuello.

Jodería el éxito de Galicia y puede hundir las expectativas europeas.

Degüelle, D. Mariano, degüelle.

Degüelle, D. Mariano

Anónimo dijo...

¿Rubalcaba?, bien. Gracias.

3.876.972+tipex.

Ramón de Mielina dijo...

hace tiempo que dejé de creer en la democracia y demás pamplinas... vamos que me aburren...

Raúl Ciriza dijo...

Me tengo que releer este libro, porque en una primera lectura me ha dejado bastante frío. Seguramente sea por lo grande de los dos anteriores, Derrumbe y La ofensa, que veo que habías comentado aquí también. Quizás esperaba más carnaza, no sé, o más lírica, o más de algo... me quedo como que no se ha cerrado bien la trilogía.

Releeré, ya te digo, para ver si me he perdido algo.

rakel dijo...

Creo que lo que a ti te hace falta,bueno...una de las cosas que te hacen falta es un P 10.Aunque con eso no te den muchos días de baja.Lo mejor una baja en toda regla.
Tengo oídas de alguien que se duerme en el suelo y cuando se despierta,llama al suap....por si te sirve de ayuda...

supersalvajuan dijo...

El P10, era eso, joder, que no me acordaba.